domingo, 4 de mayo de 2014

6. IMPACTOS AMBIENTALES DE DOÑANA

IMPACTOS MEDIOAMBIENTALES DE DOÑANA
Hoy en día tres grandes amenazas cercan a Doñana. Desde el este, el dragado del Guadalquivir, desde el noroeste, la caótica situación de cultivos ilegales de fresa que aíslan el parque nacional y compiten con el humedal por el agua del acuífero. Por el sur, en la costa, la reciente ampliación de la refinería de la Rábida y un posible oleoducto que  multiplican el riesgo de un accidente petrolífico.
Fragmentación del territorio

Doñana es una de las últimas áreas costeras sin urbanizar del suroeste de España y cuenta con valiosos fondos marinos y con uno de los pocos sistemas de dunas móviles de la Península Ibérica.

En la década de los 80, el Parlamento de Andalucía aprobó una moción por la cual se realizaban las gestiones pertinentes para la construcción de la infraestructura de la carretera Huelva-Cádiz (en el mapa, línea amarilla punteada), vía por el interior, fuera del Parque Nacional, según el trazado aprobado en el Plan Director Territorial de Coordinación de la Comarca de Doñana.
La fragmentación del territorio de Doñana es causada por la construcción de carreteras y  caminos. Dicha fragmentación provoca la degradación del medio natural de Doñana que afecta gravemente a la flora y fauna del parque.De hecho, la muerte de linces ibéricos es una consecuencia de la fragmentación del entorno del parque.
Explotación de los acuíferos
Uno de los retos más importantes es la gestión del agua y la sobreexplotación del acuífero del que bebe Doñana.
Doñana tiene problemas graves, pero menos que hace 40 años, cuando comenzó su conservación.
Respecto a los problemas que hoy tiene que afrontar este espacio natural es necesario que se cuente con agua superficial y subterránea de calidad. El acuífero Almonte-Marismas, que es el que surte a Doñana, se está secando debido a la presión del turismo y, sobre todo, a la agricultura descontrolada. Las zonas más afectadas están asociadas al riego de parcelas agrarias.
Existe desde el año 1974 un descenso generalizado de los niveles. Gran parte de este acuífero se encuentra en un estado de precaución, peligro o alerta. Además, en algunas zonas el nivel ha llegado a bajar unos 10 metros y las lluvias no logran revertir la situación.
No se deben consentir las extracciones ilegales de agua en la zona. Hay unos 1.000 pozos ilegales que extraen agua del Almonte-Marismas.
Otro de los riesgos la alta concentración de nitratos en las aguas. Detrás de este asunto también parece que están los productos químicos utilizados en la agricultura.


No hay comentarios:

Publicar un comentario